«Urbano y Simona»

Norah Borges

La vida y trayectoria de Norah Borges estuvo marcada por la literatura desde su infancia, tanto es así que sus primeras creaciones fueron literarias, siendo ella aún una niña. A pesar de ello, y curiosamente, será su hermano, Jorge Luis Borges, el que se dedicará a la literatura, mientras que ella se desarrollará como artista plástica.

Tras su formación en Europa, el desarrollo artístico de Borges irá casi de la mano de la literatura de vanguardia, con ella como ilustradora de movimientos como el ultraísmo. Pero una vez deja atrás esta estética y se produce lo que se conoce como el retorno al orden, Norah Borges no deja de mirar a la literatura como fuente de inspiración y de desarrollo intelectual. Así, podemos ver un considerable número de obras inspiradas en publicaciones literarias, tanto clásicas como contemporáneas.

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  Urbano y Simona, 1930

  Óleos sobre duraboard
  54 x 60 cm

  Colección Ralli

Detrás de los personajes

La obra “Urbano y Simona” representa a los personajes de las novelas de Ramón Pérez de Ayala tituladas “Luna de miel, luna de hiel” y “Los trabajos de Urbano y Simona”, primera y segunda parte respectivamente de Las novelas de Urbano y Simona (como se conocen a ambas partes juntas), publicadas ambas en 1923.

En ellas se narra la enmarañada historia de dos jóvenes particularmente inocentes que, a pesar de haber contraído matrimonio, eran totalmente ajenos a todo aquello que tuviese relación con la intimidad de la pareja, todo ello a causa de la escasa y equívoca educación que habían recibido al respecto. En la primera parte, los jóvenes son trasladados a vivir al campo para ver si así, alejados de todos y en contacto con la naturaleza, despertaban sus instintos. En la segunda parte, la historia continúa a partir de la horrible noticia de que la familia de Urbano ha caído en la ruina. Urbano, que gracias a la ayuda de un sacerdote ha comprendido qué implica un matrimonio, está dispuesto a seducir a Simona y enamorarla desde un plano más carnal, mientras que su familia pretende anular el no consumado matrimonio para que el joven se dedique a la vida religiosa.

Más allá de los personajes principales de la historia, los propios Urbano y Simona, en la novela destaca el papel de las madres de los jóvenes, y especialmente fundamental es el papel de la madre de Urbano, Micaela Cano de Fano.

Ambas novelas pueden ser consideradas un ensayo sobre la educación sexual en la España de los años 20, y corresponden a una etapa en la que el autor deja de lado el realismo por este simbolismo caricaturesco que las caracteriza.

El cuadro fue realizado diez años después de la publicación de Las novelas de Urbano y Simona, habiendo realizado una primera versión del mismo en 1923, un grabado que fue publicado en la revista Alfar. La elección de una obra tan actual y con un contenido tan revolucionario por parte de Norah Borges, nos da una pista de que tras su estética armónica y calmada encontraremos reflexiones más revolucionarias.

Silvia Sánchez Ruiz
Curadora